La variedad infinita de las lanas
Cuando se es principiante en el mundo del tejido o el bricolaje con lana, puede ser abrumador enfrentar la enorme variedad de ovillos disponibles. Hay lanas gruesas, delgadas, suaves, rugosas, lisas, y de fantasía. La gama de colores es igualmente impresionante: desde tonos sólidos hasta combinaciones multicolores que parecen infinitas. Para alguien que recién empieza, elegir el tipo de lana adecuado puede ser un desafío. Es normal preguntarse: ¿Qué lana es la más cálida? ¿Cuál es la más suave y cuál no pica? Y si el proyecto es para un bebé, ¿qué tipo de lana es la más adecuada?
En esta guía, te ayudaré a resolver estas dudas, explorando los tipos más comunes de lanas, sus propiedades y cómo elegir la mejor para cada proyecto. Hablaremos sobre lanas suaves, cálidas, y prácticas, además de darte consejos útiles para que tu experiencia tejiendo o haciendo manualidades con lana sea la mejor posible.
¿Qué tipo de lana elegir para cada proyecto?
Al iniciar un proyecto, ya sea un jersey, una bufanda o una manta, la elección de la lana es crucial para el éxito. Las lanas no son todas iguales: algunas son más cálidas, otras más ligeras, y muchas veces se recomienda un tipo específico según el proyecto. Aquí es donde entran en juego las propiedades de cada tipo de lana, como su suavidad, calidez y durabilidad.
Por ejemplo, si vas a hacer una manta o un gorro para un bebé, es fundamental elegir una lana que sea suave y no irrite la piel. Las lanas de merino y cashmere son famosas por ser increíblemente suaves y, por lo tanto, muy populares para este tipo de prendas. Si lo que buscas es calidez, las lanas de alpaca o de mohair son excelentes opciones, ya que no solo proporcionan abrigo sino que también son ligeras y no demasiado voluminosas.
Cuando empecé a trabajar con lana, me encontré con muchas de estas preguntas. Quería hacer un proyecto pero no sabía por dónde empezar. ¿Qué lana sería la mejor? Y lo más importante, ¿Cómo saber si sería cómoda de llevar? Aprendí que la clave está en entender las características de cada tipo de lana, lo que cubrimos a continuación.
Tipos de lanas más populares
Lana de Merino
Esta lana es muy popular debido a su suavidad y calidez. Proviene de las ovejas merinas, conocidas por producir una lana fina que es perfecta para ropa que va directamente sobre la piel, como suéteres o mantas para bebés. Además, tiene propiedades aislantes que la hacen adecuada tanto para el frío como para climas más templados.
Lana de Alpaca
Si buscas una lana cálida pero ligera, la alpaca es una excelente opción. Es hipoalergénica, lo que significa que es ideal para personas con piel sensible. Además, la lana de alpaca tiene un brillo natural que la hace destacar, y se siente muy lujosa al tacto.
Lana de Mohair
Este tipo de lana proviene de la cabra de Angora y es famosa por su capacidad para proporcionar calidez sin ser pesada. Es una lana muy fuerte y resistente, perfecta para proyectos duraderos. Además, tiene una textura suave y un brillo que la hace popular para prendas especiales.
Lana Sintética
Aunque no es tan suave como las naturales, las lanas sintéticas (como el acrílico) son una opción económica y práctica para proyectos grandes, como mantas o bufandas. Se pueden encontrar en una enorme variedad de colores y texturas, y son fáciles de cuidar, ya que son lavables a máquina.
Cashmere
Conocida por ser una de las lanas más lujosas, el cashmere es increíblemente suave y ligera. Proviene de las cabras de Cachemira y se utiliza en prendas de alta calidad. Aunque es más costosa, su suavidad y durabilidad la hacen una opción ideal para proyectos que requieran un toque especial.
Lanas según su suavidad y calidez
Si lo que buscas es una lana que no pique, la lana de merino y el cashmere son opciones infalibles. Ambas son increíblemente suaves, lo que las hace perfectas para ropa que estará en contacto directo con la piel. Cuando se trata de calidez, la lana de alpaca y el mohair son ganadoras. Estas lanas no solo retienen bien el calor, sino que también son livianas, lo que significa que puedes crear prendas cálidas sin que resulten pesadas o incómodas.
Recuerdo que cuando empecé a tejer, uno de los primeros problemas que tuve fue encontrar una lana que fuera cálida pero que no fuera irritante al contacto con la piel. ¡Es un desafío común! Sin embargo, descubrí que las lanas de alta calidad, como la alpaca o el merino, no solo brindan calidez sino también una textura suave que es muy cómoda de usar.
Colores y texturas: Cómo elegir la lana adecuada
Otro aspecto que complica la elección es la gama de colores y texturas disponibles. Desde tonos claros y pasteles perfectos para bebés, hasta colores vibrantes y oscuros ideales para prendas de invierno, las opciones son casi infinitas. Si te gusta experimentar, las lanas multicolores o con efectos de fantasía, como las que tienen un hilo brillante entrelazado, pueden darle un toque único a tu proyecto.
En cuanto a las texturas, los hilos gruesos y esponjosos son perfectos para proyectos como bufandas o mantas que requieran mucho volumen y abrigo. Por otro lado, los hilos más finos son ideales para trabajos más detallados y prendas ligeras, como suéteres o chales.
Lanas especiales para proyectos únicos
Si te sientes creativo o quieres hacer un proyecto único, las lanas de fantasía pueden ser una excelente opción. Estas lanas incluyen hilos brillantes, texturas rizadas o esponjosas, y pueden transformar un proyecto básico en algo verdaderamente espectacular. Son perfectas para proyectos decorativos o accesorios llamativos.
Uno de los primeros proyectos en los que utilicé este tipo de lana fue una bufanda con hilo de fantasía brillante. El resultado fue espectacular, y aunque no era el proyecto más sencillo, el acabado fue único y llamativo, perfecto para un regalo especial.
Consejos para principiantes en la elección de lanas
Como principiante, el mejor consejo que te puedo dar es empezar con lanas suaves y fáciles de trabajar. La lana de merino o los hilos de acrílico suave son perfectos para tus primeros proyectos. No solo son fáciles de manejar, sino que también ofrecen resultados satisfactorios, ya que sus texturas son cómodas y versátiles.
Además, asegúrate de elegir una lana adecuada para el proyecto que tienes en mente. Si vas a tejer algo para un bebé, opta por una lana suave y lavable, mientras que para un suéter de invierno, una lana gruesa y cálida será la mejor opción.